EL TÁNDEM PERFECTO

Hay veces que uno lee un buen artículo, un buen libro, un buen editorial o una buena canción que te hace reflexionar sobre lo que se dice.Hoy ha sido uno de los raros días en los que me ha pasado esto. Cuando estaba hojeando El Pais (todavía no comprendo por qué el nombre de este periódico no lleva la tilde) he dado con uno estos raros acontecimientos con la tribuna libre del para mí una persona honesta: David Grossman . Este personaje, israelí, formaba un tándem único con el ya difunto Edward Said.
Said era otro tío honesto que criticaba las masacres que los israelitas estaban haciendo a los palestinos, pero que también rechazaba los atentados suicidas y la corrupción de los políticos palestinos. Pues bien, Said nos dejó hace ya tres años, pero todavía nos queda la voz de Grossman.
La historia de este escritor es trágica..... En sus textos siempre se ha rebelado contra los atentados ejercidos por los kamikazes palestinos pero también contra la brutalidad ejercida por el país que ama y que está llevando a Israel hacia la autodestrucción como pueblo. Digo que es trágica la vida de Grossman porque un día de este verano leyendo una de sus fantásticas crónicas sobre la realidad del conflicto árabe-israelí, supe que uno de sus hijos, militar para más señas, murió por culpa de un misil lanzado por Hezbola. Cualquier otra persona hubiera utilizado ese artículo para justificar las matanzas que este pasado verano llevó a cabo Israel en el Líbano, sin embargo ocurrió todo lo contrario. ¡Qué grande, David! Si os pica (os lo recomiendo, ¡se me pone la piel de gallina al leerlo de nuevo!) la curiosidad y queréis ver lo que Grossman escribió este verano después de la muerte de su hijo, pinchad este link: Nuestra familia ha perdido la guerra